Me apasiona la novela histórica, bueno, lo que yo denomino novela histórica, término con el que seguramente muchos "puristas" del género no estarán de acuerdo... La novela histórica que a mí me llena y me hace vivir y sentir una historia con el alma, es aquella que enmarcada en un contexto histórico, del que se nos da una profunda información y cuyos acontecimientos sociales, económicos y políticos, son importantes para la trama, viene aderezada por un cierto número de ingredientes que hacen que yo me sumerja en la historia de tal manera, que me cuesta mucho salir de allí (porque la verdad, es que me teletransporto a una época y a un lugar tan fascinantes, y me rodeo de unos personajes tan fantásticos que, en muchas ocasiones, son pocas las ganas que tengo de volver a poner los pies en la cruda realidad...); algunos de esos elementos son: una apasionada historia de amor, intrigas políticas que hacen peligrar la tranquilidad de nuestros protagonistas, episodios de venganzas y traiciones, luchas por recuperar un poder arrebatado injustamente, duros intentos por vivir conforme unos ideales en los que firmemente se cree y por los que merece la pena incluso hasta morir.... Todo ello, preferiblemente, protagonizado por mujeres a las que suelo admirar y cuyo lugar en la novela me encantaría ocupar, y hombres fascinantes que logran enamorar a una con su carisma, su inteligencia, su encanto y su valentía. Por mencionar alguno de los títulos del género que han logrado convertirse en mis favoritos están "Los pilares de la tierra" de Ken Follet , "Te daré la tierra" de Chufo Llorens, "La catedral del mar" de Ildefonso Falcones;"La herencia de la tierra" de Andrés Vidal; "El rey de la ciudad púrpura" de Rebecca Gablé (en realidad, tods los de esta autora), "El médico" de Noah Gordon;"El símbolo de cobre" de Katia Fox....
Así que,
cuando entre las novedades del mes pasado de la editorial Grijalbo, me encontré
con este título perteneciente a la novela histórica que tanto me gusta, y al
que comparaban con el mismísimo "Los pilares de la tierra", la boca
se me hizo agua al imaginar que tras las páginas de la que creía que iba a ser
la mejor historia que había leído en mucho tiempo, se encontraba el "cinco
estrellas" que yo tanto anhelaba. No obstante, bien haya sido por lo altas
que eran mis expectativos, bien debido al propio argumento de la historia que
no ha conseguido llenarme, lo cierto es que el libro, que aunque sí me ha
resultado entretenido, se encuentra muy lejos de ocupar mi lista de cabecera
dentro de un género, del que podría decirse que es uno de mis favoritos.
En la
historia que hoy nos ocupa vamos a viajar hasta el ducado de Lorena, a finales
del siglo XVII. El ducado, se encuentra envuelto en una situación política de
lo más convulsa, por el acoso al que sus habitantes, se ven sometidos de manera
casi permanente por parte del ejército francés de Luis XIV desde hace más de 30
años. Las gentes del lugar, sueñan con el día en el que su legítimo gobernante,
el duque ahora exiliado en Austria, se haga de nuevo con el poder y puedan
recuperar la independencia y la libertad que tanto ansían.
El
protagonista de la novela va a ser el joven cirujano ambulante Nicolas Déruet,
de espíritu libre y aventurero, quien tras su aprendizaje en Nancy y con ganas
de llevar su conocimiento a todo a aquel que lo necesitaba, decidió partir y
recorrer todo el ducado compartiendo el increíble don con el que había sido
bendecido.
Sin
embargo, el destino quiere que vuelva a Nancy, y allí tiene que colaborar con
una comadrona cuyo dominio de la profesión y también su belleza, logran
cautivarlo desde el primer momento que la ve, consiguiendo que su espíritu
independiente necesite por primera vez en su vida, asentarse en un lugar
definitivo.
Es así como vuelve a reencontrarse con su
maestro, el bueno de François Delvaux, quien le abre nuevamente las puertas de
su hogar y también su consulta, en la que espera tenerlo como compañero para
poder volver a trabajar codo con codo. François es consciente de que su alumno,
le ha superado hace ya mucho tiempo, y también de que se ha convertido en uno
de los mejores cirujanos, que pueden encontrarse en muchos miles de kilómetros
a la redonda.
Nicolas, ama su profesión por encima de todo, y no deja de leer,
de investigar, de aprender, de formarse, ni un sólo día. Está ávido de
conocimientos, de ir cada día más allá en su lucha contra la enfermedad y en el
descubrimiento de nuevos remedios para todos los males que le son conocidos. Su
técnica como cirujano y la habilidad y precisión de manos, son muy famosas en
el lugar, hecho que le ha llevado a ganarse la enemistad de alguno de los
médicos de la época, y que intentaban vengarse pretendiendo ningunear y
subestimar la valía de los cirujanos ambulantes.
Sin
embargo, cuando Nicolas parecía haber encontrado ese estado de felicidad que
todos deseamos, un hecho de lo más dramático sucede y enturbia lo que se
divisaba como un futuro de lo más prometedor: un paciente muy importante que
había requerido sus servicios, muere tras la operación a la que es sometido...
Este trágico acontecimiento es la excusa perfecta para muchos, que veían un
fuerte rival en Nicolas, por lo que aprovechan para acusarlo de asesinato, así
que la única salida que tiene nuestro protagonista es huir, y acaba uniéndose
como cirujano al ejército del legítimo duque de Lorena en su guerra por
recuperar el poder que le ha sido arrebatado...
Nicolas,
pasará muchos años en el exilio, y a su vuelta, las cosas habrán cambiado mucho
más de lo que nunca había podido imaginar... Sólo el amor por su oficio y sus
ganas de seguir aprendiendo y ayudando a los demás, lograrán mantenerlo a
flote.....
Parece que
el libro tiene todos los ingredientes por los que debería haberme cautivado, y
sin embargo, no ha sido así. El libro me ha gustado, pero ha habido partes,
como su época en la guerra durante su exilio que se me hicieron
interminables... Los personajes principales, tampoco han logrado conquistarme
como suelen hacerlo los protagonistas de estas novelas: Nicolas, que se ve un
gran tipo, no logró traspasar con su carisma las páginas del libro y llegar a
mi corazón, lo sentí demasiado lejos durante toda la novela, y ese detalle
impidió también que la disfrutara como me habría gustado. Marianne, la
comadrona, si bien la admiré por su coraje y por lo bien que desempeñaba su
profesión, tampoco es un personaje en el que deseara convertirme durante el
tiempo que duró mi lectura. La historia de amor que protagonizan, tampoco fue
de mi gusto...hay un triángulo amoroso, que no me convenció para nada,
totalmente carente de la pasión y del amor verdadero que me habría gustado
encontrar.
Como partes positivas tengo que destacar la fantástica ambientación que se respira desde la primera página de la novela hasta que llegamos al mismo final. El autor nos traslada y nos hace sentir en todo momento en el siglo XVII, respiramos el ambiente de la corte, nos retumba en los oídos el duro sonido de la guerra, entramos en las humildes casas de Lorena, en sus conventos, en sus palacios... Con una prosa totalmente carente de artificios, hace una magnífica descripción del lugar y la época, y en este aspecto, sí que se gana al lector desde el minuto uno.
Como partes positivas tengo que destacar la fantástica ambientación que se respira desde la primera página de la novela hasta que llegamos al mismo final. El autor nos traslada y nos hace sentir en todo momento en el siglo XVII, respiramos el ambiente de la corte, nos retumba en los oídos el duro sonido de la guerra, entramos en las humildes casas de Lorena, en sus conventos, en sus palacios... Con una prosa totalmente carente de artificios, hace una magnífica descripción del lugar y la época, y en este aspecto, sí que se gana al lector desde el minuto uno.
Y como
punto fuerte de la novela, la fantástica documentación que el autor ha tenido
que llevar a cabo, para poder ofrecernos con tanta minuciosidad todas las
operaciones, estudios, investigaciones, remedios... realizadas por nuestro
protagonista. Cuando uno termina la novela, puede sentir lo muchísimo que se ha
empapado de la forma en que se vivía la medicina en el siglo XVII, de sus
avances, de sus logros, del origen o principio de muchos descubrimientos de los
que disfrutamos hoy en día. Esta cuestión me ha parecido apasionante, he
aprendido muchísimo, me he sorprendido más y he disfrutado observando la
cuidadosa y precisa técnica de este fantástico cirujano. También me ha gustado
saber más acerca de las diferencias que había entre los médicos de la época
(que eran los que estudiaban Medicina) y los cirujanos ambulantes, que salvando
excepciones de los que se formaban y preparaban con gran dedicación como
nuestro protagonista, ejercían como barberos y cirujanos indistintamente,
sin tener en cuenta para nada los
tratados de anatomía que les habrían venido la mar de bien.
Así que,
aunque haya puntos que no me han gustado del todo, ya veis que también he
encontrado ingredientes que considero que enriquecen la lectura que nos ocupa
hoy. Si el tema de la medicina y la historia os resultan interesantes, estoy
segura de que entonces es una novela que vais a disfrutar...¿Y vosotros?¿Sois
aficionados al género?¿Vais a animaros a sumergiros en la apasionante vida de
este cirujano ambulante? A ver qué me contáis!
Apenas leo novela histórica y si lo hago, me gustan más las historias románticas ambientadas en Escocia y por la nota que le has dado tampoco me animaría a leerlo.
ResponderEliminarBesos y gracias por reseña!
A mí también me encanta la novela romántica ambientada en Escocia, me vuelven loca las historias de highlanders,de hecho "Forastera", es uno de mis libros favoritos. Si no lo has leído,te lo recomiendo encarecidamente ;-)
EliminarAy, a mí me encantó. Es, de momento, una de mis mejores lecturas de 2014 y seguramente cerraré el año con el libro en el podio.
ResponderEliminarUn besito.
Recuerdo que cuando leí tu reseña,me entraron todavía muchas más ganas de leerlo,y sin embargo,ya ves que a mí no logró entusiasmarme.Me alegra de todas formas que hayas dejado aquí tu opinión para que otros lectores puedan guiarse por otras opiniones,y por supuesto me alegra que tú lo hayas disfrutado tanto :-)
EliminarCreo que del mes de abril no pasa. Lo tengo en casa desde hace ya mas de un mes y tengo ganas de leerlo. Ademas, que a Xavi le haya gustado es una garantia porque compartimos mucho en gustos literarios.
ResponderEliminarSaludos
Ojalá lo disfrutes! A mí me habría encantado que me hubiera apasionado....ya me contarás!
EliminarA pesar de esos peros que señalas, este libro lo terminaré leyendo. Pero ahora con unas poquitas menos expectativas, por si acaso.
ResponderEliminarBesotes!!!
Le tengo muchas ganas! Ojalá prontito caiga porque desde que leí su sinopsis y empecé a leer reseñas...puff mis ganas aumentan.
ResponderEliminarBesos
Pues entre la nota que le das y que la novela histórica no me apasiona, creo que lo dejo pasar. Un beso
ResponderEliminarA mí me pasa lo mismo. Me gusta la novela histórica que te traslada a una época lejana bien documentada y con una ficción llena de intriga, aventuras, amor, pasiones, etc. y unos personajes interesantes. Este tipo de libros me encantan. Lástima que los personajes del Sol bajo la seda no sean geniales. De todas maneras, me apetece leer mucho este libro.
ResponderEliminarUn beso.
¡Vaya! entre tanta reseña positiva sobre esta novela, que me hacían pensar que yo había leído otro libro, en la tuya he encontrado una opinión bastante parecida a la mía, coincidiendo en bastantes aspectos. Ya no me siento tan rara ;)
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegra haber encontrado este blog, soy muy aficionada a la lectura y me ha parecido interesante la exposición que haces sobre este libro, a mi me gusta el tema de como se practicaba la medicina en epocas pasadas, por lo que creo que leeré el libro. Un saludo
ResponderEliminarA mi me gustó bastante en general, pero no acabó de llenarme del todo. La parte de la guerra se me hizo un poco aburrida, pero luego mejora. Se deja leer
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