Las tres
heridas de Paloma Sánchez-Garnica
Ernesto
Santamaría es un hombre de cuarenta años que acaba de quedarse viudo. Profesor
en un colegio, siempre ha soñado con convertirse en escritor, y ahora, para
cumplir la última voluntad de su esposa, que así se lo había pedido, ha
decidido dejar su puesto como docente para dedicarse por fin por completo a su
verdadera pasión: la escritura.
Siempre ha
sido un amante de las antigüedades, y en una de sus visitas al rastro, adquiere
una vieja lata de hojalata que contiene la fotografía de una joven pareja, sus
nombres, Andrés y Mercedes, un lugar, Móstoles 1936 y unas cartas fechadas en
la época de la guerra civil española.
Una fuerte
corazonada, un presentimiento y también una gran curiosidad, le llevan a
decidirse a descubrir la historia de la pareja. Sabe que será muy complicado,
que han pasado muchos años, y que aquella época fue una época muy difícil en la
que mucha gente desaparecía sin dejar rastro, pero aún así, algo en su interior
le dice, que esa historia podría convertirse en la historia que toda su vida
lleva soñando poder contar…
Paralela a
la investigación de Ernesto, la autora nos lleva al pasado, a los años de la
guerra civil española, para contarnos la historia de los protagonistas de la
foto, de sus familias, de los que los conocieron, de los que los ayudaron pero
también de los que los perjudicaron enormemente…
Y es así
cómo descubrimos que Mercedes y Andrés eran un joven matrimonio de Móstoles,
que acababan de casarse, que estaban esperando su primer hijo, y que por culpa
de un hombre al que Mercedes había rechazado, y que se aprovecha del conflicto
para acusar a Andrés y que lo encierren, ven su felicidad truncada para siempre…
También en
este viaje al pasado, conocemos a la familia Cifuentes, pieza clave fundamental
en nuestra historia. Es una familia de Madrid, fascista, excepto la hija mayor,
Teresa, una de las protagonistas de la novela y el personaje que a mí más me ha
gustado. Teresa está enamorada de Arturo, un rojo, y por supuesto un joven con
el que su familia jamás aceptará que contraiga matrimonio. Es una chica
rebelde, de ideas modernas, muy inteligente y de gran corazón, no soporta los
machismos de la época ni tampoco las diferencias existentes entre las clases
sociales. Por circunstancias del destino, las vidas de Teresa y Mercedes se
verán entrecruzadas, se harán inseparables, pasarán juntas la dura etapa de la
guerra y se apoyarán en los difíciles momentos que la vida les tiene preparados…
No penséis
que estamos ante la típica novela sobre la guerra civil española. No es una
novela política, es una novela social, en la que vemos cómo el conflicto afectó
a las gentes de ambos bandos; no es una novela sobre la guerra, es una historia
sobre las personas que tuvieron que vivir, o mejor dicho, intentar sobrevivir,
en unos años tan complicados y difíciles.
Y también
es una historia de amor, de superación, de odios, de venganzas, de redención…
de aclaración de misterios y errores del pasado, una historia de la que
cualquiera de nuestros abuelos podrían haber sido los protagonistas, porque
sabemos que muchos de ellos han tenido que pasar por las mismas penurias…
La prosa de
Paloma Sánchez- Garnica es exquisita, tiene un estilo muy cuidado y envolvente,
que la convierten en una gran contadora de historias.
La
alternancia del presente y el pasado, está perfectamente entrelazada, el
presente está contado en primera persona, es Ernesto el que nos cuenta la
historia y además, cada capítulo, a diferencia de los que transcurren en la época
de la guerra civil, tiene un título. Los capítulos del pasado se diferencian de
los actuales no sólo en el uso de un narrador omnisciente que nos cuenta todo
lo acontecido en tercera persona, sino que los capítulos, en vez de tener un
título, están numerados.
Me ha
encantado el homenaje que la autora hace a los libros y a los poetas y autores
de la época. No sólo a Miguel Hernández, al que ya claramente hace alusión con
el título de la novela y que disfrutamos también como personaje secundario, al
hacerlo compañero de Arturo, el gran amor de Teresa; sino que también menciona
a muchos otros: Ramón J. Sender, Neruda, Lorca… Hace un guiño también a todos
los géneros literarios, no sólo a la novela, sino que habla también de poesía y
posteriormente convierte a unos de los protagonistas en autor teatral… También
refleja la importancia de la lectura, y hace que el personaje de Mercedes sea
una lectora voraz, y nos enseña todos los beneficios que los libros
proporcionaban a aquellas mujeres que leían…
Así que si
os gustan las buenas historias que llegan al corazón, no podéis dejar de leer
esta novela, porque sus personajes, sus vivencias, sus secretos… podrían haber
sido perfectamente parte de nuestro pasado, un pasado no tan lejano…
De la misma
autora también os recomiendo "El alma de las piedras"
Yo estoy deseando leerla, que todo lo que leo es aconsejando su lectura.
ResponderEliminarLa tengo apuntada desde hace tiempo, todos los que la habéis leído habláis maravillas de ella
ResponderEliminarbesos
Yo se la regalé a mi suegra, que suele coincidir con mis gustos literarios, con vistas a leerlo en un futuro próximo, así que en cualquier momento, lo "sustraigo" y me pongo, que desde luego tiene todos los ingredientes para ser una muy buena novela.
ResponderEliminarSaludos!
Todo el que la ha leído la recomienda. Tu reseña me ha animado todavía un poco más a que me ponga con ella.
ResponderEliminarBesos,
¡Muy buena reseña! Hago mis palabras las de Carmen: la entrada de hoy es una clara invitación a su lectura. Besos.
ResponderEliminarNo me importaría leerlo, es una temática que suele gustarme.
ResponderEliminarAparte, con reseñas así... quién la deja pasar =P
Besotes
Me has acabado de convencer con tu reseña, así que intentaré leerla prontito, que tengo ganas de conocer cómo escribe esta autora. Un beso
ResponderEliminarMe apetece muchísimo este libro, más aún leyendo reseñas como la tuya.
ResponderEliminarBesotes
Me voy a unir a lo que comentan todos. Tiene buena pinta el libro lo pondré en pendientes.
ResponderEliminarBss.
Me encanta esta autora :) He leído tanto La brisa de Oriente como El alma de las piedras y le tengo muchas ganas a éste y,después de leer tu reseña, más todavía ;) Un beso.
ResponderEliminarSi no fuera porque la parte "fantástica" no pegaba en absoluto y me pareció totalmente prescindible, le pondría un 10. :-)
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